octubre 3, 2024
ZONAS DE BAJAS EMISIONES:
LA GUÍA ESENCIAL.
RESUMEN
Las zonas de bajas emisiones (ZBE) son áreas donde están regulado el tránsito de los vehículos más contaminantes. Se han convertido en una medida muy extendida en las ciudades europeas, con más de 320 ZBE activas registradas para 2022 y más de 500 previstas para 2025.
Las zonas de bajas emisiones (ZBE) son una solución probada para frenar la contaminación atmosférica, que suponen el mayor riesgo ambiental para la salud en Europa. Unas ZBE bien diseñadas suelen requerir una implementación gradual, acompañada de una participación exhaustiva de las partes interesadas, comunicación pública, estrategias de aplicación efectivas y medidas complementarias para garantizar la equidad y la aceptación.
Esta guía proporciona una descripción general sintetizada en base a los conocimientos disponibles sobre zonas de bajas emisiones, utilizando tanto la investigación propia de Clean Cities como las publicaciones científicas más actualizadas. Incluye una inmersión profunda en las ZBE, soluciones prácticas para los gobiernos locales y ejemplos de mejores prácticas de ciudades de toda Europa.
Clean Cities recomienda que las ciudades comiencen inmediatamente a implantar zonas de bajas emisiones si actualmente no existen tales medidas, y que todas tengan un camino claro para convertirse en zonas de cero emisiones en 2030 para abordar el doble desafío de la contaminación del aire y el cambio climático.
Principales conclusiones
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Las ZBE reducen con especial éxito las concentraciones de dióxido de nitrógeno (NO2) en torno a un 20 % en una amplia gama de condiciones. En algunos casos, como en el centro de Londres, las reducciones
pueden alcanzar hasta el 46 %. -
No existe un enfoque único para las ZBE, ya que varían en función de factores como el tamaño, el rigor,
los plazos y las exenciones. -
Las zonas de bajas emisiones pueden tener un impacto positivo en el sector minorista de una ciudad; por ejemplo, el antiguo área de Madrid estuvo vinculada a un aumento del 8,6 % de las ventas minoristas en el corredor
central de la ciudad. -
Las ciudades deben garantizar una transición justa, especialmente para los más vulnerables, por ejemplo, introduciendo costes reducidos para la compra de bicicletas, tarifas reducidas de transporte público y centros
de movilidad compartida en zonas mal conectadas.
