En esta tabla se muestra cómo se clasifican las ciudades según la cantidad de infraestructura ciclista protegida que tienen, es decir, carriles bici diseñados específicamente y separados del tráfico motorizado, para ofrecer rutas seguras y accesibles a personas que se mueven en bicicleta, sin importar su edad.
Contar con este tipo de infraestructuras es clave para que más niños, niñas y familias se animen a usar la bicicleta. Además, ayuda a reducir el uso del coche y a construir ciudades más seguras, saludables y sostenibles.
Únete a la conversación, difunde.